El Juzgado de Familia de Pamplona ha acordado conceder a un padre divorciado el uso de la vivienda familiar al estimar parcialmente su demanda para modificar el convenio regulador pactado en 2013 con su exmujer, que ahora debe abandonarla. La juez, que ha tenido en cuenta la similitud de sus ingresos, también otorga al padre la guarda y custodia compartida de sus dos hijos al considerar que es conveniente un reparto más equilibrado del tiempo que convinieron hace casi cuatro años.